Este jueves salió de prisión el ingeniero comercial Rafael Garay, luego que la Corte Suprema le otorgara la libertad condicional tras cumplir la mitad de su condena.
Garay fue condenado en octubre de 2018 a siete años de presidio y a una multa de 21 UTM, o sea, cerca de 1 millón de pesos, por el delito de estafas a 29 personas, perjuicio que alcanzó alrededor de $1.300 millones, según consignó El Mercurio.
Una de sus víctimas fue Marlen de la Fuente, exesposa del periodista Iván Núñez, quien no estaba nada contenta con la noticia de la liberación del hombre que la estafó con sus ahorros de 76 millones de pesos.
La periodista confió en el hombre debido a la larga amistad que mantenía con su exmarido, pero jamás sospechó lo que ocurriría. Así lo afirmó en el matinal Bienvenidos, donde también reveló un curioso regalo entregado por Garay a Núñez, antes de escapar del país.
En esa época, Garay había hecho creer a todos que tenía un tumor cerebral y que le quedaba poco tiempo de vida, lo que tenía al periodista muy preocupado. Aún así, ella le exigió a Núñez ir a conversar con él para que le devolviera su dinero pues ya había pasado mucho tiempo.
“(Iván) Se fue a hablar con él. Volvió muy rápido. ‘¿Qué pasó mi amor?’. ‘Es que me dijo que estaba muy mal y que no me puede recibir’ (…) Le dije: ‘Lo siento, pero vas a tener que hablar con él’”, recordó Marlen.
“Le digo ‘anda donde Rafael, dile que me haga la devolución de mi dinero, de mis 76 millones, nada más’. Iván se va, habla con él y llega a las dos horas después. Pobre Iván, llega con una cara, y me dice ‘¿quieres saber lo que yo realmente vi?’. ‘Sí, por supuesto, quiero saberlo todo’”, añadió.
Según su relato, Garay estaba ebrio y acompañado por una mujer. “Después me enteré que era la chica del Passapoga, la chica del fuego, con la que estaba en su casa en La Dehesa”, dijo ella.
“Me cuenta que lo vio muy mal. Él siempre pensando en la salud y bienestar de Garay. Yo le digo ‘¿pero cómo estaba tomando? Él es una persona que no toma’. ‘Sí, pero tú también tienes que entender que si él se va a morir, a lo mejor ya está en las últimas y se está tomando esa botella de whisky’, me dijo Iván”, aseguró.
“‘Bueno, ¿y cómo te fue?, ¿qué dice? Porque él se va en dos días más y quiero saber si me va a devolver mi dinero’. Yo ya insistía con la devolución de mi dinero, tengo que ser honesta, porque ya no veía salida”, reconoció.
“Ahí me dice ‘yo te aseguro que no va a pasar nada, él es un tipo 100% honesto y lo está pasando mal. Pero no te preocupes, quédate tranquila, tu negocio igual lo vas a tener, yo te voy a hacer la devolución de tu dinero, pero para mí lo más importante ahora es que él esté bien’”, aseguró sobre la conversación con su exmarido.
El regalo
En medio de dicha charla, el periodista saca una caja de su bolsillo que dejó intrigada a Marlen. “Me dice ‘está tan mal, que mira lo que me entregó. Tienen un significado muy importante para Rafael. Estas colleras se las vendió Frank Sinatra al papá de Rafael en Las Vegas’“, aseveró ella.
“Esta es la historia que Iván me contó, evidentemente sin creerla. Porque quiero dejar claro que cuando él me lo cuenta, me dice ‘pobre, Rafael me contó esta historia’. Pero él siempre pensando ‘pobre, me contó esta historia que para él es muy sentimental, evidentemente esto no es real, pero es sentimental por su papá’”, aclaró en el matinal.
Se trataba de unas colleras de fantasía, que Garay aseguraba que eran de platino y con zafiro. “Digo ‘ya, este tipo ya se pasó de la burla’. Eran de plástico, lo más parecido a una fantasía de plata. Y el zafiro era un plástico. Pero eran grandes, ostentosas, de esas que tú dices ‘chuta, sí las tenía Frank Sinatra’”, afirmó.
“Iván es una persona excelente, tiene una gran corazón, y yo creo que por ahí evidentemente se lo trabajó Rafael. Iván siempre ha sido tremendamente generoso con la gente. Y él dijo ‘aquí yo me trabajo a la persona’, porque sabía que yo iba a ir sí o sí en lo que dijera mi marido en ese entonces”, finalizó.
Recordemos que la abogada de Garay aseguró que ahora que está libre el hombre busca retomar su vida familiar con su hijo y su pareja, y poder trabajar. “Ya tiene una oferta de trabajo de un amigo, y (quiere) terminar de escribir un libro que había comenzado estando privado de libertad. Él ahora quiere estar tranquilo, alejarse de los medios, quiere ver si puede resolver su situación de vida”, aseguró a El Mercurio.
