La boda de Michelle Salas ha incluido dos vestidos blancos y un diseño en verde olivo que harán soñar a las futuras novias.
La promesa de unión eterna entre Michelle Salas y Danilo Díaz Granados se consolidó en una idílica boda en Italia. La ceremonia nupcial cumplió todas las expectativas que la empresaria e hija de Luis Miguel soñó algún día. Comenzando por sus vestidos de novia: dos románticos vestidos en blanco impoluto y uno en verde olivo, firmados por Dolce & Gabbana.
Desde que Michelle Salas conoció a Danilo, sintió una complicidad especial. Una suerte del destino que se conoce como ‘amor a primera vista, ya que no nos separamos desde que nos conocimos’. Era cuestión de tiempo para que su compromiso formal iniciara con la pedida de mano en un castillo cercano a Il Sereno en Lago di Como, en Italia. ‘Desde ese día a hoy mi vida cambio para siempre’. La integrante de la familia Pinal siempre tuvo una visión muy clara de cómo quería que fuera su vestido de novia. ‘Aunque es verdad que mi estilo se ha ido transformando en el paso de los años y tuve un par de dudas acerca de si tendría que usar algo más simple y minimalista’, no obstante, guiada por su intuición, eligió ‘algo que se sintiera sofisticado y festivo’.
La novia sabía que los diseñadores Domenico y Stefano serían los indicados para vestirla en el gran día. El sueño se cumplió en el taller de Alta Moda de Dolce & Gabbana en Milán, ‘para mí ellos son los pioneros en poder crear ese look de una mujer moderna, fuerte y sexy’. La joyería elegida fue de Tiffany, ‘para el primer día seleccioné un look más retro, para el segundo día algo muy minimalista porque el vestido ya habla por sí solo y para el tercer día un feeling más romántico, joven y divertido’.